Segundo "truquito" de belleza interior: El temor a Dios

En la pasada reflexión pudimos reflexionar sobre la verdadera belleza interior y que el paso principal para desarrollar esa belleza es pasando tiempo con Dios. A continuación vamos a reflexionar sobre este pasaje y otro “truquito” de belleza esencial para estar regias para el Señor.

Proverbios 11:22 dice: “Como zarcillo de oro en el hocico de un cerdo es la mujer hermosa y apartada de razón”

Lo leíste? Vuelve atrás y léelo nuevamente!

Ok! Fuerte verdad? Salomón esta imaginando una cerda tratando de ser bonita, colocándose una joya en el hocico, pero continua siendo una cerda. El problema aquí no es el adorno que falte o sobre, el problema está en si en la cerda.

Esto me recuerda una ilustración del Pastor Paul Washer, “Si pones un cerdo entre medio de dos mesas, una con un banquete con todos los manjares exquisitos, y otra mesa solo tienes basura, sobras viejas y podridas… a donde crees que se va a dirigir el cerdo? Exacto! Va a ir a la mesa donde tiene basura y comida podrida porque esa es su naturaleza! Mas sin embargo imagina que el cerdo está comiendo esa basura y de momento se va transformando en humano. Qué crees que pasara ahora? Se dará cuenta de lo que está haciendo, se avergonzara y rápidamente iría a la otra mesa con las delicias.”

Así mismo pasa con nosotros cuando Cristo viene a nuestras vidas y nos transforma ya no somos los mismos. Mujer que me lees, si has entregado tu vida a Jesucristo YA NO ERES LA MISMA!

Tu belleza antes dependía de tus adornos y cuán bien lucias, ya no. Esto no quiere decir que no te puedas arreglar, ni mucho menos estar por ahí desarreglada (no por favor). Me refiero a que NO debe ni puede ser lo más importante. Lo más importante ahora es desarrollar tu belleza interior y como lo podemos hacer?

Primero pasando tiempo con Dios, segundo el TEMOR de Dios. No es un temor de miedo o terror, sino miedo a ofender a Dios, ofender el nombre del Señor. Se trata de comprender la seriedad del pecado por el castigo que merece ante un Dios justo.

Entonces quisiera provocar que hagas un examen interior y te preguntes, estoy pasando suficiente tiempo con Dios? Tengo temor de Dios? Me preocupa el pecado y como eso puede ofenderle? Mi hermana, esa es la verdadera belleza, no se trata de perfección, no se trata de cuan bien luces físicamente  se trata de tu interior! Busca muy adentro de ti, como esta tu vida, y si encuentras que algo está fallando BASTA YA! Pide perdón al Señor, comienza a orar y clamarle para que saque todo aquello que no le agrada. Cuanta belleza hay en una mujer humillada ante el Señor! Esa belleza hermana estoy segura que todos la notaran!

Hoy es un buen día para arrepentirnos y humillarnos ante el Dios todopoderoso, si aun no has tenido un encuentro intimo con Jesucristo, pídele que entre en tu corazón, arrepiéntete de tus pecados y asi como la ilustración del cerdo, deja de comer en la mesa de la basura teniendo un banquete riquísimo que una vez lo pruebes nunca volverás atrás.

Si ya eres una mujer de Dios pero sientes que te falta desarrollar esa belleza interior, el que estés leyendo esto no es casualidad, para Dios no hay casualidades. Es hora de poner un alto! comienza ya! saca todo aquello que desagrada al Señor y comienza a vivir una vida en obediencia y santa. Animo!!Dios esta de nuestro lado!

Dios las bendiga!

Iris Medina